El otro día estuve en la consulta de mi hermana, que es mi dentista, para una revisión periódica.
En cuestión de médicos en la familia me siento como una península: estoy rodeada de médicos por todas partes menos por una parte relativamente amplia que me une al continente : los hermanos y cuñados que no son médicos.
En fin, que como decía mi dentista es mi hermana. Y como hermanas que somos mis visitas a su consulta se convierten en tertulias femeninas en las que damos un repaso femenino- es decir, en profundidad- a todo lo que se nos ocurre.
Ya desde la puerta las enfermeras – a las que conozco desde hace años – me reciben con los brazos abiertos sabiendo que la tertulia promete. Asi que me siento en el sillón, la enfermera le dá al botoncito para elevarlo y ya empezamos con las preguntas de rigor “¿cómo están tus niños? ¿Qué tal tu marido? ¿Y usted? Trae un bolso muy parecido al de la doctora…
Y entonces aparece mi hermana con sus guantes estériles dispuesta a no dejarme escapar sin hacerme todo lo que tiene ya planificado desde que me citó.
En esta última consulta le comenté que qué protectores tan monos habia comprado para evitar las manchas mientras te atiende – esos que te ponen al cuello con unas pincitas metálicas – . Normalmente son de color azul o verde “quirófano” pero en esta ocasión eran de color naranja muy halloween. Yo claro le pedí unos cuantos para mis fotos …
Y alli me teneis abandonada a mi suerte con la jeringuilla de la anestesia apuntándo amenazante y decidida a mi boca.
Creo, de verdad., que la humanidad no evolucionará lo suficiente hasta que los dentista te anestesien solo con mirarte o por algún otro mecanismo indoloro…
A partir de ese momento me toca tomar una actitud pasivo-activa participando en la conversación con la boca abierta. Esto que así a priori parece imposible, os aseguro que no lo es.
Gesticulo, hago signos de asentimiento con el dedo pulgar hacia arriba o de negación con el dedo indice moviéndolo en movimientos regulares hacia los lados. Elevo las cejas para expresar sorpresa o frunzo el ceño para indicar extrañeza.
La doctora y la enfermera charlan y charlan contestando a mis gestos y cuando ya no encuentro idioma gestual retiro el aspirador de la boca, le hago gesto de parar y blablabla blablabla..parrafada. Me pongo el aspirador de nuevo y continuamos.
Tener confianza con tu dentista te dá la tranquilidad de que puedes mostrar tu inquietud o tus dudas con tranquilidad.
Por ejemplo, cuando coge el torno con el ruidito ese de “Bisssssshhh” levanto la mano en señal de parar y le digo “¿ese instrumento es imprescindible?”. Calla y abre la boca- me indica autoritaria.
O por ejemplo cuando coge uno de esos aparatos con ganchos en los extremos hago signo de parar y le pregunto “ ¿no tienes algo menos puntiagudo?” . Calla y abre la boca, me repite.
O por ejemplo cuando me pone una pasta que sabe mal hago señal de parar y le comento “¿no lo tienes de sabor a frambuesa?” a lo que ella me contesta “¡ te quieres callar y estarte quieta de una ….. vez! … asi que aunque empleo todo tipo de tácticas ella persiste en acabar la faena y me neutraliza con un algodón o aspirador en la boca.
Cuando terminamos siempre me pregunta..¿bueno que tal?, no ha sido para tanto ¿no?.
La verdad es que me tenso mucho en ese sillón…y al final es mas leve de lo que parece.
Por la noche cuando vuelve a su casa suele llamarme ¿qué tal estas? ¿te molesta algo? . E hilamos de nuevo la hebra en una conversación larga y reposada para rematar los flecos que se nos puedan haber quedado abiertos en nuestra tertulia.
Ella sabe que como detalle en un par de días le llevaré algun postrecito de los que les gustan en casa, como este banoffii de plátano y dulce de leche, que está de rechupete.
RECETA
Toma nota de los ingredientes ( salen unos 6)
10 galletas digestive
50 gr de mantequilla en pomada
1 cucharadita de cacao en polvo
300 gr de nata montada (monta la nata con nata liquda para montar, que debe estar muy fría)
2 plátanos
Dulce de leche o toffe líquido
Además …vas a necesitas una tiras de plástico semirígido de pasteleria o, si no dispones de ellas, quizás tengas en casa o puedas comprar en una papeleria una hoja de plástico de las que se utlizan para poner de cubreportada en los dossieres. La cortas en tiras de unos 5 cms. de ancho . Con ellas vamos a hacer los moldes para dar, en frío, forma redonda a los Banoffee.
Formas un aro con el plástico de unos 3 cms de diámetro (para que no se abra pégalo con celo).
Comenzamos a preparar la receta triturándo las galletas y mezclándolas con la mantequilla y el cacao.
Pon esta mezcla en un molde desmontable ( este si tiene que ser un molde metálico) cubriendo bien la base .
Hornealo a 180º durante 10 minutos. Sácalo del horno y deja que se enfríe.
Una vez fría la galleta tienes que ir montando el postre , en los moldes de plástico.
Primero pones una base de 1 cm de altura del horneado de galleta. A continuación vas poniendo sobre ella el resto de los ingredientes.
Primero una capa de plátano cortado en rodajas muy fina (puedes poner una o dos capas, según te guste más).
Pon sobre esto una cucharada, de las de café, de dulce de leche.
Sobre ella pones una capa de nata, que cubrirás de nuevo con una capa de rodajas muy finas de plátano. Añade nuevamente nata hasta el borde del molde y espolvorea en la superficie con chocolate en polvo.
¿A que no puede ser más fácil?…y delicioso…
Me encantan tus historias,Ja ,Ja.Que sepas que el dulce de leche es el postre favorito de Alvaro,le va a encantar.Como a mi tus historias.Este fin de semana lo hago.Bueniiisimo.Bss
Fácil y rico ¿a que si? bss
Me encanta la pinta que tiene este postre!!! Creo que la próxima vez que haga dulce de leche reservaré un poco para preparar esta delicia.
Besos preciosa!!
Gracias Pilar!! yo ya tengo tus suizos en mi lista de prioridades.bss
Impresionante, tiene que estar buenisimo porque me parece una combinacion perfecta, un beso.
José está estupendo. Hasta hace poco no conocía esta receta. Ha sido un descubrimiento. Anímate a hacerla, a tus seguidores y a ti os va a encantar
Me encanta. No paras ni en el dentista. Me he reído mucho con lo del protector naranja. Tu receta tiene una pinta estupenda.
jajaja es que tengo a todo el entorno “super activado”. Gracias bss
¡Ay!, en mi casa rara vez llegan los platanos a madurar tanto como para dejarlos para una tarta y eso que llevo tiempo pensando en preparar algo así. Voy a tener que comprar y guardar para que no se los coman.
Un saludo Cris
Que pinta tiene! , se me hace la boca agua!!!
Chelo ¡anímate con ésta! creo que este fin de semana ya va a haber que poner la chimenea…imagínate..en tu salón..con tu chimenea y este banoffee…
jajajja, en mi casa también hay mucho médico y enfermera, uffff esta receta te la copio seguro, siempre me encanto en Buenos Aires el helado de banana split con dulce de leche (nunca supe que era el split) …espectacular tu receta, bsss
¡Gracias! desde luego es deliciosa. Me la sopló al oído una amiga y es de cine!!
Que historia tan bonita!!! Me gusta muchísimo la receta…con plátanos!!! Con lo bien que viene el potasio para el cerebro y la memoria!!! Por cierto, con tanto platano seguro q recordarás de donde es el “mantelito” q acompaña la magnifica receta. Es monísimo!! Todas tus fotografias son tan ideales!!! Rebosantes de inspiración decorativa!!! Enhorabuena me encantan tus bodegones!!! Bss
Gracias, gracias, gracias Lourdes…por el papel ¡queda fenomenal! ¿eh?. Creo que te haré a ti y a tus papeles una entradita en el blog…en breve..prometido…y el platito de corazón ¿qué me cuentas?. ¡¡Esto de tener hermanas como tú es un lujo!!
… hmmm. Interesante!!
El platito monísimo!!! Muy “cozy”.Me gusta!!