Bueno, pues ya tenemos aquí la Navidad. Ahora si que si.
El lunes es Nochebuena y yo que estaba tan tranquila he empezado a ponerme en modo cena navideña, que es lo que me toca en casa. Este año la Nochebuena toca celebrarla con la familia de mi marido, y nosotros seremos los anfitriones. Nos reuniremos 23 personas, entre mayores y pequeños. Y en Nochevieja repetimos con mi familia casi otros 30.
Como digo estaba tranquila hasta que imaginé el volumen del menú y las cantidades implicadas, así que cogí el teléfono y con esa capacidad organizadora que me caracteriza, comencé a repartir a diestro y siniestro tareas y asignación de platos…los entrantes, el primero, el segundo, el postre y hasta los dulces. Me quedé para mi el primero y el postre y reasigné responsabilidades en cuanto a los demás.
Y no olvidemos que al día siguiente en Navidad, comemos en casa de mis padres, casi otras treinta personas, padres, hermanos y sobrinos. Allí me han adjudicado el postre..y aquí me tenéis dándole vueltas a ver qué preparo porque en ambas ocasiones hay que dar el do de pecho.
La verdad es que aunque las Navidades me ponen un poquito tristona, creo que vale la pena celebrarlas como merecen, porque siempre queda un poso de recuerdos felices con el que adornar nuestra vida. Disfrutar en una ocasión especial de nuestros padres, hermanos, hijos, sobrinos, amigos.
Por eso este año he decidido aparcar en la medida de lo posible los problemas, las preocupaciones, las dudas, las ansiedades y focalizarme en hacer de estos días un conjunto de momentos a recordar.
Centrada en esta tarea me he puesto a recordar anécdotas de las Navidades ya pasadas, como las obras de teatro que montábamos en casa de mis padres con nuestros hijos como protagonistas representándo el misterio de la Navidad.
O a mis hijas en las representaciones de Navidad del cole, o cuando las llevábamos a ver Cortilandia y sus caritas de emoción (ahora son ellas las que llevan a sus primos pequeños) o las tardes con ellas en la Plaza Mayor viendo los puestos y comprándo piezas del Belén, costumbre que seguimos conservando…
Las tardes de Reyes en la cabalgata en la Puerta de Alcalá, el mismo sitio al que iba mi marido de pequeño, y en las que no se quien se lo pasaba mejor si nosotros o los pequeños…o el año que filmamos a los Reyes dejándoles los regalos en el salón de casa como prueba testimonial de su existencia, ante las dudas de las peques…
O en la navidad del año pasado con mi hermano recién divorciado cuando terminamos de montarle la casa nueva el dia 5 de Enero por la tarde, de sorpresa, mientras él estaba en la Cabalgata de Reyes con sus hijos…había que ver sus caras al llegar a casa y encontrarse el árbol y el Belén recién montados…
O nuestras Navidades diferentes que hemos pasado en otros países como Thailandia, Egipto, Francia, China, Estados Unidos…
Me viene a la memoria mi imagen recién casada, hace 24 años cosiendo un disfraz de Papa Noel que hemos utilizado todos los años con algún mayor disfrazado repartiendo los regalos a nuestros peques la noche del 24 de Diciembre…antes se disfrazaba alguno de nosotros, y ahora los sobrinos mayores, porque tengo sobrinos que ya estan casados y otros que acaban de cumplir los 5 años…amplio espectro de edades..asi que no nos aburrimos.
En fin, esas pequeñas o grandes cosas que parece que en estas fechas se nos agolpan como recuerdos…fechas en las que todos hablamos de Paz, de amor, de buenos deseos…y yo me pregunto ¿por qué el día 7 de Enero, de una manera tan facilona, de repente cambiamos el chip y volvemos a la realidad, a la vida normal y ya no queda ni rastro de ese espíritu de concordia.
Deberíamos reflexionar acerca de ello…y en lo que hemos pedido a los Reyes Magos…que por cierto este año se reviste totalmente, en mi caso de deseos de esperanza, trabajo, honestidad, y sobre todo construir algo que no existe , la certeza de que si somos una fuerte piña y exigimos a nuestro entorno honestidad y productividad, saldremos de muchos de los problemas que tenemos.
Y aqui me tenéis, con todas estas cosas en mente y muchas otras más, preprándo en los pocos ratos libres que tengo, estos coquitos para mi padre, que le encantan…os explico ahora la forma de hacerlos.
RECETA
Como veréis estos cocos me han quedado muy blanquitos. El motivo es que he utilizado coco rallado fresco, pero os recomiendo que no os compliqueis la vida y que compréis el que venden ya rallado porque quedan incluso más ricos. Después de esta sesión de fotos he hecho la misma receta con este tipo de coco rallado, que compré en Mercadona y han salido sencillamente deliciosos.
En las fotos podéis ver que le he añadido también chocolate, pero esto sólo es necesario si ya queréis rizar el rizo…os lo dejo aquí como idea innovadora, aunque no necesaria, ya que simplemente sin el chocolate están deliciosos.
Necesitamos:
200 gr de coco rallado
1 huevo grande tamaño L
1/2 cucharadita de extracto de vainilla (opcional)
Un pizca de sal
100 ml de leche de coco (la venden en lata en los supermercados).
En un bol pon el coco , con la vainilla y la sal.
Bate la clara a punto de nieve y mézclalo, con cuidado para que no se baje, con la mezcla del coco. Añadele poco a poco la leche de coco y déja reposar la mezcla unos 30 minutos tapada.
Mientras precalienta el horno a 180ºC. Cubre una bandeja de horno con papel de hornear y forma montoncitos en forma de pirámide sobre el papel de hornear.
Mételo al horno unos 20- 25 minutos o hasta que veas que se dora el pico de la pirámide.
Sácalos del horno y déjalos enfriar en la bandeja.
Si quieres ponerle el chocolate, derrítelo en el microondas con cuidado. Baña la base de cada coquito en el chocolate y déjalo enfriar en la misma bandeja.
Y ya están, una vez fríos, listos para tomar unos coquitos preparados de una manera diferente a la habitual…
Oye, Kuki, que digo yo que tamaño número de comensales para esas reuniones familiares, es como organizar una quedada, ¿no? Ja ja ja. Desde luego que con tanta gente no cabe esperar otra cosa que cada cual haga su aportación culinaria. ¡Pues menudo ataque al corazón de pensar en tooooda la comida que hay que comprar y a la que hay que dar cuerpo!
Una nunca sabe hasta cuando puede durar el espíritu navideño. En mi casa se ha disipado un poco, entre otras circunstancias, porque mi hija, de 11 años, ya ha descubierto que la magia de los Reyes Magos tiene una representación física de verdad, y es que hasta se ha autoinvitado a venir a comprar los regalos de la familia, y por esas sí que no paso. Noooo.
Los coquitos … ¡ricos, ricos! Ya me acuerdo de los que hizo Mar en la quedada. Y es que es un dulce que me encanta, y muy típico del pueblo del que son oriundos mis padres, aunque sin chocolate.
Aprovecho para desearte unas felicísimas fiestas navideñas. Espero que las disfrutes con tus seres más queridos.
Un beso!!
Yolanda, muchas gracias, también te deseo una Navidad súper feliz con todos los tuyos..lo del número dá igual sean veinte o sólo 2, lo importante es compartir y ser felices y en eso seguro que eres una experta en agradar a los que te rodean!!. Y un consejo ¡Ni se te ocurra dejar a tus hijos ir a comprar contigo sus regalos! digan lo que digan les gusta el sabor sorpresa.
Las mias son más mayores y nunca saben qué les vamos a regalar..ellas hacen una lista de cosas que le sapetecen y saben que luego siempre aparecemos con alguna sorpresa.
Mis hijas son las que me reclaman el espíritu navideño, no te digo más…Bueno, besitos y espero que nos veamos pronto!!
aqui se hacen con almendra de la tierra y de base obleas
Oye, pues pásanos la receta ¡Que ricos!. Besos
yo soy dual con las navidades, las amo y me horrorizan, añoro a mis padres que ya se fueron y a mi hermana que tampoco está,y siempre estoy deseando que se acaben. Por otro lado me gusta reunirme con mis hermanas y pasarlo fenomenal, adoro a los Reyes Magos¡¡¡, en fin que rollo¡¡¡¡¡¡
tus cocos geniales, esos caen seguro¡¡
un beso
Concha
Concha me pasa lo mismo con las Navidades, sentimiento ambiguo, pero como hay que pasarlas lo mejor es coger el toro por los cuernos y disfrutarlas..tambien me encantan los Reyes…¡besitos!
Qué entrañable. Muy bonito. Comparto contigo el tener una familia con una amplia diferencia de edad, cosa que es una bendición, porque siempre hay algún bebé o niño pequeño por el que mantener la ilusión navideña y la llegada mágica de Papa Noel. También nos reunimos bastantes. Este año me libro de hacerlo en mi casa, pero también colaboramos todos en el menú. A mí me han tocado los aperitivos. Bueno, tengo todo el fin de semana para ir pensando qué hago. BeZitos. Me ha encantado tu post (como la mayoría, yo también tengo sentimientos contrapuestos en estas fechas)
Cósima, se que este año son fechas muy especiales para vosotros así que desde aquí todo mi cariño.. a ver si pasamos esta especie de gripe que es la Navidad y la disfrutamos en lo que podamos..besos.
Muy bonito Cuqui!! :-))
Gracias Chelo y ya he puesto la Poinsetia en el lugar de honor de mi salón!!. Besos
Soy un loro. Me pasa lo mismo que cuando quedamos en persona. Se me olvidaba lo mejor: que me encantan los coquitos (desde pequeña). Me presenté una vez a un concurso bloguero y gané con unos coquitos. Pero fué Almudena la que los hizo. Desde entonces los hacemos muchísimo para regalar. Tu padre tiene un gusto excelente. Tengo que probarlos con ese toque de chocolate. Mas besos.
¿Pero cuantos concursos has ganado?….ya he perdido la cuenta…yo nunca me he presentado a ninguno, soy un poco cobardica porque me frustra un montón perder…a ver si en 2013 me lanzo a algo parecido…besos
El año pasado, fueron una de mis peores navidades, me tocó pasar la enfermedad grave de un familiar y he perdido muchos seres queridos en estas fechas pero, estoy contigo en que hay que intentar revivir y tratar de buscarle ese encanto que años anteriores estas fechas nos dejaba. Es un mes que el calendario nos regala para expresarnos libremente y sobretodo para vivir como pequeños y, porqué no hacerlo? Es nuestro este mes, llámese invento, compras compulsivas o lo que sea pero es un mes de ilusión, un mes para comprar cosas para hacer con nuestras propias manos y regalarlas. Un mes único con personajes increíbles que regalan sonrisas… Un mes de reflexión, un mes de oportunidad para empezar el siguiente con mejor cara, con energías abundantes. Simplemente lo tenemos y porqué desaprovecharlo?
Mary, al final la Navidad es como una gripe recurrente que llega cada año…lo mejor es dejarse llevar e intentar disfrutarla lo mejor que se pueda..ahora bien, sin excesos porque de eso si que estoy hasta el gorro..besitos y me alegro que estas Navidades vayan a ser mejores que las pasadas..parece que tienes razón en lo que decías en Facebook de que tras un bajón viene una subida ¿no? …pásalo bien guapa!
Salu2 kuki…Jo!! pues si que os juntais unos cuantos para las fiestas…te deseo que lo paséis genial…bueno,bueno…pues a mí no me gustan mucho estos días por diferentes motivos pero intento sobrevivir cada año a estas fiestas…yo tb me hago esa reflexión que tu te haces: ¿por qué el día 7 de Enero, de una manera tan facilona, de repente cambiamos el chip y volvemos a la realidad, a la vida normal y ya no queda ni rastro de ese espíritu de concordia…pues la verdad es que hay asuntos que cuesta entender, pero!! …
En cuanto a los coquitos pues te diré que te han quedado genial incluídas las fotografías; esto como siempre.Parecen fáciles de hacer y tienen que estar bien ricos.Bueno pues te deseo felices fiestas, que lo pases genial junto a los tuyos y nos vemos por aquí o por el fb.1 besote,ana
Besos Ana y como somos un colectivo amplio los que mandaríamos las Navidades lejos, a lo mejor podíamos constituirnos en grupo de presión,..pero mejor intentamos convertirlo en un momento de disfrute, cada uno en el nivel de disfrute que le apetezca…yo para ti deseo máximo nivel de disfrute y máximo nivel de súper suerte en el 2013. Besos.
Aunque estas navidades, por distintas razones, he preferido que pasaran casi desapercibidas, no puedo dejar de comentar tus coquitos… seguro que los hago, pero fuera de estas fechas, me encantan y ya con el toque de chocolate, son una auténtica locura.
Un beso y feliz año nuevo!
Feliz año Carmen y toda la suerte del mundo en este año. Los coquitos están riquísimos. Ya me contarás!! Besos
ese sabor a coco me encanta
¡Gracias espe! me encanta verte por aquí! besote